Una batalla y tres posibles ganadores con ChatGPT
La inteligencia artificial no es un término novedoso.
Su origen se remonta a los años cincuenta.
En aquel entonces, el matemático Alan Mathison Turing se planteó si las máquinas podían pensar.
Para ello, publicó un artículo en la revista Mind, llamado Computing Machinery and intelligence.
Y no era solo una pregunta.
Turing propuso un método para encontrar una respuesta.
Hoy se conoce como el test de Turing y sigue siendo la columna vertebral de todos los experimentos sobre inteligencia artificial.
Fue el puntapié inicial para que, con el correr de los años, la tecnología pueda avanzar a mayor velocidad.
A continuación, vamos a contarte cómo la inteligencia artificial podría cambiar el futuro (no muy lejano). Y, por supuesto, exponer cuáles podrían ser los principales ganadores.
Supercomputación a escala
El 24 de enero de 2023 fue un día clave para la inteligencia artificial.
Microsoft Corporation (MSFT) inició la tercera fase de asociación a largo plazo con OpenAI, una compañía que desarrolla inteligencia artificial sin fines de lucro.
Este acuerdo le permite a Microsoft acelerar los avances de inteligencia artificial para aplicar a sus productos y servicios.
En otras palabras, la compañía de Satya Nadella se sitúa a la vanguardia de los últimos avances en inteligencia artificial y podría liderar la próxima disrupción tecnológica.
Una de las grandes innovaciones que trae la inteligencia artificial al negocio de Microsoft, es la incorporación de las funciones de ChatGPT a todas sus aplicaciones.
Este robot puede responder una variedad de preguntas, hacer tareas por escrito, conversar con fluidez e incluso dar todo tipo de consejos.
Estos avances podrían potenciar el crecimiento de Microsoft a largo plazo, incrementando el valor de la compañía a gran escala.
Asimismo, debemos comprender que la compañía está incorporando este robot en el buscador Bing.
Esto podría tener un impacto negativo para el negocio de Google, que hasta ahora su buscador goza de fuertes barreras de entrada.
A continuación, te contamos por qué Google podría ser otro gran ganador de esta nueva ola de la inteligencia artificial.
El contraataque de Google
Pareciera que Microsoft está poniendo en tela de juicio la capacidad de Alphabet, Inc. (GOOG) para mantener su liderazgo en la industria.
Nunca deberíamos subestimar a Google.
A los pocos días del anuncio, le preguntaron a Sundar Pichai (el Director Ejecutivo de Alphabet) qué opinaba sobre el lanzamiento de ChatGPT.
Sin titubeos, el CEO indio dijo que la compañía tiene la misma tecnología y no veía ninguna amenaza para su negocio.
Así como Microsoft tiene un acuerdo con OpenAI, Alphabet adquirió Deepmind en 2014, una compañía de inteligencia artificial inglesa.
No obstante, fue recién ayer cuando Sundar Pichai anunció el lanzamiento de Bard, su propio robot inteligente que puede proporcionar respuestas frescas y de alta calidad.
Por el momento, Bard está en una fase de prueba.
No obstante, la compañía pretende lanzarlo a todos los usuarios más adelante.
Esta novedad no solo podría convertir a Alphabet en otro posible ganador, sino también robustecer su foso para mantener su ventaja competitiva en los próximos años.
El “Google chino” se sube a la ola
No solo las compañías estadounidenses pueden sacar provecho de la inteligencia artificial.
China, por ejemplo, tiene innumerables avances en este campo.
El gran problema de las compañías tecnológicas chinas es el acoso constante y las regulaciones del propio Gobierno chino, en función de la “prosperidad común” (la característica fundamental del modelo socialista chino).
A pesar de lo anterior, Baidú Inc. (BIDU) podría ser uno de los principales ganadores de la nueva ola de inteligencia artificial.
Hoy anunció el lanzamiento de ERNIE Bot, un robot similar a ChatGPT de Microsoft.
Del mismo modo que Alphabet, el robot de Baidú está en fase de prueba y que el lanzamiento oficial será a partir de marzo.
Robin Li, el Director Ejecutivo de la compañía, no fue menos que Sundar Pichai y dijo que la compañía dispone de la misma tecnología de Occidente para desarrollar su propio robot.
Más allá de los riesgos de invertir en China, no deberíamos subestimar el potencial de Baidú.
En definitiva, con el uso de la inteligencia artificial, estas tres compañías podrían tener un crecimiento explosivo en los próximos años.
Puedes elegir tu propia aventura, pero recuerda: al final, gana lo simple.
Esto fue todo por hoy,
Diego Matianich