Un poco de oxígeno, ¿sostenible?

Desde que Silicon Valley Bank fue intervenido, comenzó a circular una horrible sensación de incomodidad en el inversor.

Un temblor en el sector bancario es lo último que quisiéramos volver a ver.

Tanto es así, que el problema de credibilidad se trasladó a Europa.

Hoy el inversor estaba atento a la decisión de tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE).

Tal como estaba previsto, determinó una subida de 50 puntos básicos y dejó la tasa de referencia en Europa en el 3,5%.

Fuente: Banco Central Europeo

Lo más interesante no fue la decisión en sí, sino las aclaraciones de Christine Lagarde en la rueda de prensa.

La presidenta del BCE dijo que la inflación sigue siendo demasiado alta y que no dejarán de ser agresivos por el solo hecho de que el inversor tema por la estabilidad de los bancos.

Explicó que el sistema bancario en Europa es sólido y lo suficientemente resistente como para enfrentar una crisis de liquidez.

Fuente: CNN Business

También envió un claro mensaje de tranquilidad: en caso de que hubiese un problema con el sector bancario, el BCE dispone de otras herramientas para combatirlo.

En otras palabras, el BCE no cambia de postura ante los sucesos que trascendieron durante los últimos días.

El hecho de que una funcionaria tan importante envíe un mensaje de tranquilidad es una buena noticia para el inversor.

No obstante, como inversores debemos saber que la reputación del BCE está bastante manchada.

¡No ha hecho otra cosa equivocarse durante los últimos años!

En resumidas cuentas, subestimó la inflación, siguió imprimiendo dinero cuando no hacía falta y erró en todas sus proyecciones económicas.

Cuesta creer en lo que dicen con ese repertorio tan abrumador.

Pero no solo por eso, sino que sus proyecciones siguen siendo algo difíciles de cumplir.

El BCE pretende seguir subiendo los tipos de interés para reducir el nivel de inflación, pero creen que no provocarán una recesión ni pondrán en riesgo la estabilidad del sistema financiero.

La propia Christine Lagarde acaba de ratificar que recién en 2025 podrían alcanzar el nivel de inflación objetivo (2%).

Serán dos años largos…

¿Vuelve el optimismo con las acciones?

Nos encanta tener una opinión propia.

El espíritu crítico es lo que nos ayuda a crecer como inversores.

Lo importante es que tú tengas tu propia visión de lo que sucede también, independientemente de lo que “el mercado” opine.

Y si del “Señor Mercado” hablamos, pareciera que las declaraciones de Christine Lagarde lo dejaron bastante conforme (al menos, por ahora).

Hoy el apetito por el riesgo (y por las acciones europeas) volvió.

El propio sector bancario tuvo un buen desempeño, luego de días de desconcierto.

Aquí hay algo que siempre debes recordar: el negocio bancario funciona en base a la confianza.

Nadie va a dejar su dinero en un lugar inseguro o que pueda quedarse con los ahorros de sus clientes en caso de tener algún problema de liquidez.

Mira cómo se redujeron los depósitos que había en Credit Suisse Group (CS) cuando la confianza en la entidad se desploma de golpe.

Fuente: Bloomberg

Esta es la razón por la que el Banco Central Europeo intentó “calmar las aguas” hoy.

Las acciones de Credit Suisse Group amanecieron con importantes subidas, luego de que el Banco Nacional Suizo anunciara el otorgamiento de un préstamo por USD 54.000 millones de dólares para garantizar la liquidez de CS.

A pesar de esto, recuerda que esta entidad financiera viene teniendo innumerables problemas desde hace mucho tiempo.

Si no quieres asumir riesgos innecesarios, mantente al margen.

Condicionando a la Fed

Con la decisión del Banco Central Europeo sobre la mesa, al inversor solo le queda esperar por la decisión de la Reserva Federal de los Estados Unidos (Fed) la próxima semana.

Pareciera estar comprando la idea de una recesión y una reducción de tipos de interés este mismo año.

Algunas entidades bancarias, como Bank of América o Citigroup, esperan que la Fed siga siendo agresiva, pero que se inclinen a subir los tipos de interés en solo 25 puntos básicos.

Otros bancos, como Nomura, Barclays y Goldman Sachs, creen que la Fed hará una pausa en la próxima reunión y, hasta incluso, pueda tener en mente la posibilidad de reducirlas.

La secretaria del Tesoro estadounidense, Janet Yellen, intentó llevar “agua para su molino” hoy.

Dijo que la inflación sigue siendo demasiado alta, pero que el déficit del Gobierno no es la causa principal del problema.

Además, se mostró bastante preocupada por lo ocurrido con Silicon Valley Bank y cree que las medidas de urgencia para respaldar los depósitos (y evitar otras quiebras) son necesarias.

Reflexionemos un poco…

La crisis bancaria es solo un síntoma de algo más grande: la crisis de deuda.

Fuente: Reuters

Es lógico que Janet Yellen subestime los efectos negativos del déficit en el crecimiento económico, pero no pierdan de vista que el Gobierno estadounidense todavía necesita elevar el techo de la deuda para no caer en default en julio.

Cuando esto ocurra, la deuda de la Primera Economía alcanzará los USD 50 billones en diez años, lo que supondría pagar intereses anuales equivalentes al 25% de los ingresos del Gobierno.

Y eso seguramente lo termina pagando el ciudadano con mayores impuestos.

No es la crisis bancaria, es la crisis de deuda.

La deuda impide crecer

Puede que la deuda sea algo normal, pero no es sostenible en el tiempo.

A medida que un país se endeuda, el crecimiento económico futuro se contrae.

Basta con ver lo que le sucede a la economía japonesa, que vive de recesión en recesión.

Japón es el país con la deuda pública más grande del mundo: representa el 260% de su producto interno bruto.

¿Y si Estados Unidos va rumbo a eso?

Es una posibilidad.

El propio Ray Dalio considera que esta crisis de deuda es el principio del fin del imperio estadounidense y el reinado del dólar como moneda de refugio.

Lamentablemente, estos cambios de paradigma llevan décadas en procesarse y no es una cuestión repentina.

En lo inmediato, la economía estadounidense está sólida.

De hecho, la Reserva Federal de Atlanta espera un crecimiento robusto en el producto interno bruto del primer trimestre de 2023.

Fuente: Reserva Federal de Atlanta

Esto implica que los efectos de la subida de tipos de interés más agresiva de la historia, todavía no tiene impacto en la demanda.

Todo indica que la economía se dirige hacia una recesión, pero, por ahora, nada de eso se ve en la economía real.

Más petróleo en la cartera

El precio del petróleo suele caer en una recesión.

Si la economía crece menos, va a demandar menos combustible.

En otras palabras, cuando la oferta supera a la demanda, el precio tiende a caer.

El barril de petróleo producido en Texas ya cae por debajo de los USD 70 y está presionando a la baja a las principales petroleras (los grandes ganadores del último año).

A pesar de eso, una de las personas más astutas en lo que se refiere al “pensamiento contrario”, está incrementando su posición en este sector.

Se trata de Warren Buffett.

Berkshire Hathaway, Inc. (BRK-B), la compañía que fundó y dirige, acaba de adquirir 7,9 millones más de acciones de Occidental Petroleum Corporation (OXY).

Fueron 8 transacciones entre el 13 y el 15 de marzo, y el precio promedio ponderado por acción fue de USD 59,17.

Fuente: SEC

Teniendo en cuenta que la compañía está generando un flujo de caja de USD 13,29 por acción, a precios actuales implica una tasa de rendimiento (Free Cash Flow Yield) del 23%.

Para Peter Lynch, uno de los inversores más importantes del mundo, una tasa de rendimiento de flujo de caja superior al 7% ya es atractiva.

Saca tus propias conclusiones.

Eso fue todo por hoy,

Por buenas inversiones

Diego Matianich