La teoría de Markowitz establece que una cartera óptima no solo busca maximizar el retorno, sino también minimizar el riesgo. El portafolio de mínima varianza es el punto de partida de una estrategia eficiente que permite a los inversores optimizar su rendimiento ajustado al riesgo.
La teoría moderna de portafolios, desarrollada por Harry Markowitz, es un pilar fundamental en la gestión de inversiones.
Su concepto clave es la “frontera eficiente”, que representa el conjunto óptimo de combinaciones de activos de riesgo que maximizan el retorno esperado para un nivel dado de riesgo.
Este gráfico ilustra la relación entre el riesgo (medido como la desviación estándar de los retornos) y el retorno esperado, destacando cómo los inversores pueden construir portafolios eficientes.

La curva gruesa que se observa en el gráfico es la frontera eficiente de Markowitz.
Esta muestra todas las combinaciones de activos que ofrecen el mejor retorno posible para cada nivel de riesgo.
La parte inferior de la curva representa combinaciones ineficientes, ya que existen portafolios con la misma volatilidad pero mayor rentabilidad en la parte superior de la curva.
En la práctica, los inversores deberían elegir puntos ubicados en la frontera eficiente para obtener el máximo rendimiento ajustado al riesgo.
Un punto clave en la frontera eficiente es el “portafolio de mínima varianza”.
Este portafolio tiene la menor volatilidad posible dentro del conjunto de activos de riesgo y marca el inicio de la frontera eficiente.
A medida que avanzamos hacia la derecha, encontramos combinaciones de activos con mayor riesgo pero también mayor rendimiento esperado.
Sin embargo, la teoría de Markowitz se amplió con la inclusión de un activo libre de riesgo, como los bonos del Tesoro.
La línea que conecta este activo con la cartera óptima de mercado se llama la Línea de Mercado de Capitales (CML, por sus siglas en inglés).
La CML muestra todas las combinaciones posibles entre el activo libre de riesgo y el portafolio óptimo de mercado, que en el gráfico está representado por el punto M.
Este portafolio es el único punto de la frontera eficiente que se combina con el activo libre de riesgo para generar la cartera óptima para cualquier inversor, sin importar su tolerancia al riesgo.
Los inversores más aversos al riesgo se posicionarán en una combinación con mayor proporción del activo libre de riesgo y menor exposición a la cartera de mercado, mientras que los menos aversos al riesgo pueden incluso apalancarse, es decir, tomar prestado a la tasa libre de riesgo para aumentar su exposición a la cartera M.
Este concepto se observa en los puntos C y D del gráfico, donde C representa a un inversor más conservador con una mayor asignación en el activo libre de riesgo y D a un inversor agresivo que toma una posición apalancada en la cartera de mercado.
En conclusión, la frontera eficiente de Markowitz y la Línea de Mercado de Capitales proporcionan una estructura clara para tomar decisiones de inversión.
Mientras que la primera define las combinaciones óptimas de activos de riesgo, la segunda introduce el activo libre de riesgo y permite construir portafolios óptimos para diferentes perfiles de riesgo.
Esta teoría sigue siendo una referencia clave para los inversores modernos, ayudando a estructurar carteras diversificadas y ajustadas a las preferencias de cada individuo o institución.
Esto fue todo por hoy,
Por buenas inversiones
Diego Matianich