¿Cómo ganar dinero en un mercado bajista?

¿Cómo ganar dinero en un mercado bajista?

Ganar dinero en un mercado bajista puede resultar más sencillo de lo que uno cree. El hecho de invertir solo apostando a la suba de un activo es limitarnos como inversores. Con este pensamiento, solo podríamos ganar dinero cuando el mercado sube, y no siempre será así. Una de las maneras que tiene el inversor de obtener rentabilidad en un mercado bajista, es lo que se llama “apostar a la baja”.

Eso significa que podemos implementar una estrategia contraria a lo que comúnmente estamos acostumbrados a realizar. El mercado nos permite operar instrumentos que en mercados menos desarrollados como Argentina aún no están disponibles, y los que están no tienen la liquidez suficiente como para hacerlos atractivos para los inversores.

La primera opción es la venta en corto. Esta técnica es muy utilizada en los mercados desarrollados para obtener rentabilidad en tendencias bajistas. La idea es que uno alquila el activo en cuestión (por ese alquiler paga una tasa de interés), lo vende a un precio y en un tiempo espera recomprarlo a un precio menor para devolverlo al tenedor original. La ganancia es el diferencial de precio de venta menos precios de compra menos la tasa de interés pagada.

Sin embargo, existe una segunda manera de operar “a la baja” sin tener que pedir las acciones prestadas. Se realiza mediante la compra de un ETF inverso. Se trata de un fondo de inversión que replica el movimiento opuesto de los activos que lo componen. El movimiento es 100% puro, fácil de calcular y puede utilizarse como cobertura. Se compra como una acción y se revaloriza cuando el activo subyacente cae. Si compro un ETF inversor del S&P 500, el mismo sube de precio cuando las acciones caen.

Veamos un ejemplo.

El Índice Dow Jones rastrea un índice ponderado por el precio de 30 acciones estadounidenses de gran capitalización, seleccionado por los editores del Wall Street Journal. Este índice es uno de los más importantes como referencia de lo que está pasando en el mercado norteamericano.  Hay un fondo cotizado (ETF) que replica la evolución exacta de este índice y se lo conoce como SPDR Dow Jones Industrial Average ETF Trust (DIA).

Fuente: Stockcharts

Sin embargo, también existen determinados fondos apalancados que se mueven mucho más rápido que el propio índice. Es decir, pueden llegar a replicar en dos (X2) o en tres veces (X3) el movimiento del índice. Siguiendo con el mismo ejemplo, vemos las distintas alternativas que tenemos para replicar el Índice Dow Jones con o sin apalancamiento.

  • X 1 con SPDR Dow Jones Industrial Average ETF Trust (DIA);
  • X 2 con Pro Shares Ultra Shares Dow 30 (DDM);
  • X 3 con Pro Shares Ultra Pro Dow 30 (UDOW);

Si el Índice Dow jones sube el 1%, DIA subirá el 1%, DDM subirá el 2% y UDOW el 3%. Si el Índice Dow Jones baja el 1%, DIA bajará el 1%, DDM bajará el 2% y UDOW el 3%.

Ahora viene una cuestión importante. También es posible operar el índice de manera invertida. Es decir, invertir en un instrumento que haga exactamente lo contrario que el índice.

  • X -1 con Pro Shares Short Dow 30 (DOG);
  • X -2 con Pro Shares Ultra Short Dow 30 (DXD);
  • X -3 con Pro Shares Ultra Pro Short Dow 30 (SDOW);

Si el Índice Dow Jones sube el 1%, DOG bajará el 1%, DXD bajará el 2% y SDOW el 3%. Si el Índice Dow Jones baja el 1%, DIA subirá el 1%, DXD subirá el 2% y SDOW el 3%.

Fuente: elaboración propia

Sé  que al principio puede generar confusión, pero esta tabla seguramente te ayudará a entender cómo se comporta cada uno de estos activos según el movimiento del índice de referencia.

Asimismo, en el siguiente gráfico se puede apreciar cómo varía el desempeño de cada uno de estos fondos con relación al ETF que replica de manera perfecta el movimiento del Índice Subyacente. El ETF del Dow Jones está en la sección central del gráfico con el área naranja. Los fondos apalancados directos están por encima, duplicando (X2) y triplicando (X3) su desempeño. Los fondos apalancados inversor están por debajo, duplicando a la inversa (X-2) y triplicando a la inversa (X-3) su desempeño.

Fuente: TradingView

Ahora bien, el resto de los activos funciona de manera similar. Avancemos con otro ejemplo. El Índice Nasdaq es un índice compuesto por las 100 acciones más importantes del sector de tecnología de los Estados Unidos. Incluye empresas de software, hardware, telecomunicaciones, comercio electrónico, biotecnología, entre otros. Este índice contempla a los nuevos unicornios tecnológicos que juntos forman las FAANG+M. Es decir, Facebook, Amazon, Apple, Netflix, Google + Microsoft.

Fuente: Stockcharts

Hay un fondo cotizado (ETF) que replica la evolución exacta de este índice y se lo conoce como Power Shares QQQ Trust (NASDAQ: QQQ)

Pero, como en el caso anterior, existen determinados fondos apalancados que se mueven mucho más rápido que el propio índice. Es decir, pueden llegar a replicar en dos (X2) o en tres veces (X3) el movimiento del índice. Siguiendo con el mismo ejemplo, vemos las distintas alternativas que tenemos para replicar el Índice Nasdaq con o sin apalancamiento.

  • X 2 con Power Shares QQQ Trust (QQQ);
  • X 2 con Pro Shares Ultra QQQ (QLD);
  • X 3 con Pro Shares Ultra Pro QQQ (TQQQ);

 Si el Índice Nasdaq sube el 1%, QQQ subirá el 1%, QLD subirá el 2% y TQQQ el 3%. Si el Índice Nasdaq baja el 1%, QQQ bajará el 1%, QLD bajará el 2% y TQQQ el 3%.

Ahora viene una cuestión importante. También es posible operar el índice de manera invertida. Es decir, invertir en un instrumento que haga exactamente lo contrario que el índice.

  • X -1 con Pro Shares Short QQQ (PSQ);
  • X -2 con Pro Shares Ultra Short QQQ (QID);
  • X -3 con Pro Shares Ultra Pro Short QQQ (SQQQ);

Si el Índice Nasdaq sube el 1%, PSQ bajará el 1%, QID bajará el 2% y SQQQ el 3%. Si el Índice Nasdaq baja el 1%, PSQ subirá el 1%, QID subirá el 2% y SQQQ el 3%.

Fuente: elaboración propia

Asimismo, en el siguiente gráfico se puede apreciar cómo varía el desempeño de cada uno de estos fondos con relación al ETF que replica de manera perfecta el movimiento del Índice Subyacente. El ETF del Nasdaq está en la sección central del gráfico con el área naranja. Los fondos apalancados directos están por encima, duplicando (X2) y triplicando (X3) su desempeño. Los fondos apalancados inversos están por debajo, duplicando a la inversa (X-2) y triplicando a la inversa (X-3) su desempeño.

Fuente: TradingView

Estos dos ejemplos han sido los más sencillos. Los movimientos de los ETF´s apalancados son casi perfectos. No sucede lo mismo con el resto de los activos. En el caso del petróleo o el oro, por ejemplo, los fondos utilizan posiciones especulativas en el mercado de futuros, y no siempre replican a la perfección el desempeño del activo subyacente. Por eso hay que ser muy cuidadoso a la hora de abrir una posición. No quiero entrar en detalle sobre cómo se mueve cada uno de ellos, pero te voy lo voy a explicar con el caso más extremo: la volatilidad.

La volatilidad no funciona directamente al alza o a la baja como el resto, y los instrumentos que permiten invertir en volatilidad se diferencian no por una tendencia en particular, sino más bien por la relación entre la variación de los contratos de futuros y el nivel de volatilidad de corto, mediano y largo plazo. Comencemos hablando de lo que es el Índice de Volatilidad conocido como “VIX”. El índice VIX es un indicador que mide la volatilidad de los próximos 30 días en el mercado norteamericano. Se considera a este indicador como una señal del sentimiento (o del pesimismo) del mercado en cuanto a las fluctuaciones esperadas. Muchos lo suelen llamar “El Índice del Miedo”.

Más allá de su “apodo comercial”, el VIX no es otra cosa que la variación de las opciones de compra y venta del mercado de opciones de Chicago (CBOE). El VIX tiene en cuenta los contratos del S&P 500 y proyecta las perspectivas del mercado en cuanto a la volatilidad futura. Mientras que los índices bursátiles tradicionales hacen el seguimiento de los movimientos pasados, el índice de volatilidad se enfoca en las fluctuaciones de precios esperadas, es decir, en la volatilidad implícita.

Fuente: Stockcharts

Si el VIX indica un valor superior a 20, se considera una señal de que los inversores esperan una volatilidad en el mercado mayor a la normal. Si el índice se sitúa por debajo de 20, se considera que está estable. Pero el VIX es sólo un índice. Y no hay un fondo que lo replique exactamente como en el resto de los casos. Pero existen instrumentos que suelen ofrecer cierta exposición a la volatilidad y sacar provecho de eso. Aunque repito, no siguen exactamente la variación del VIX.

  • ProShares Trust VIX Short-Term ETF (VIXY)

Este fondo mide la volatilidad implícita de los contratos de futuros del S&P 500 de los próximos 30 días.

  • ProShares Ultra VIX Short-Term Futures ETF (UVXY)

Este fondo mide la volatilidad implícita de los contratos de futuros del S&P 500 de los próximos 30 días y los multiplica por dos. Con lo cual suele tener una mayor variación que el anterior.

  • ProShares VIX Mid-Term Futures ETF (VIXM)

El VIXM, en cambio, mide la volatilidad implícita de los contratos de futuros del S&P 500 de mediano plazo. Con lo cual suele los movimientos suelen estar sensiblemente por debajo de los dos anteriores.

También podemos utilizar un ETNs (Certificados negociables en el mercado).

  • iPath Series B S&P 500 VIX Futuros a corto plazo ETN (VXX)

Este instrumento utiliza el primer y segundo contrato de futuros mensual sobre el VIX para obtener un “futuro sintético” a 30 días. El peso de estos contratos en el índice se reajusta periódicamente: cada día se hace un “rollover” de un número apropiado de contratos (se venden contratos de futuro próximos y se venden contratos de futuros del siguiente vencimiento) con el objetivo de mantener un vencimiento promedio de 30 días.

Con lo cual la utilización de estos instrumentos debe ser muy precavida, ya que evolucionan de manera distinta dependiendo la evolución de la volatilidad futura.

Esto fue todo por hoy,

Diego Matianich